Sin duda la ceremonia de premiación en los Juegos Olímpicos de Seúl 88 fue el momento más duro y triste en la historia del vóley peruano, Perú perdió la final ante la Unión Soviética por 3-2. Ellas, pese a la derrota, se convirtieron en las grandes campeonas del deporte peruano y nos orgullecieron a todos aunque quedaron en segundo lugar, recordemos que las subcampeonas fueron recibidas por el estado y por la gente con muchísimo cariño, se pasearon por las calles limeñas, fueron condecoradas y hasta lograron llenar el estadio nacional repleto de miles de personas que fueron a darles el agradecimiento ante su participación nacional.
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